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La ONU reconoce avances y llama a aunar esfuerzos y financiación para la adaptación al cambio climático
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El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) ha publicado un informe en el que analiza las iniciativas en marcha y los resultados emergentes de la adaptación a nivel global. Exponiendo progresos en la implementación y planificación de programas de adaptación, urge a un aumento en la financiación.
El informe del PNUMA asegura que, en conjunto, durante la última década se han hecho progresos a nivel nacional en todo el mundo en materia de adaptación, pero avisa de que, si bien las naciones en general han avanzado en la planificación de este tipo de proyectos, aún existen enormes brechas en la financiación en los países en desarrollo, para brindar una protección real contra los impactos climáticos como sequías, inundaciones y el aumento del nivel del mar.
El PNUMA reconoce que la pandemia afectará a la capacidad de los países para planificar, financiar e implementar acciones de adaptación e insiste en que deben tomar medidas urgentes para adaptarse a la nueva realidad del cambio climático y a los desastres que conlleva, o enfrentarán altos costes, daños y graves pérdidas económicas.
Esta quinta edición del informe contiene, además, un análisis específico de las Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN), como medidas clave para la adaptación.
PROGRESOS EN LA ADAPTACIÓN AL CAMBIO CLIMÁTICO
El informe constata progresos en la planificación de acciones para la adaptación climática. Por ejemplo, destaca que la gran mayoría de los países del mundo (81%) tienen o están elaborando un plan o estrategia nacional de adaptación, aunque la idoneidad y eficacia de estos marcos de planificación son dispares.
El PNUMA también señala que la implementación de proyectos de adaptación está aumentando a nivel global. Desde 2016, se han llevado a cabo cerca de 400 en países en desarrollo. Mientras que los proyectos de adaptación financiados con fondos multilaterales se reducen, su financiación es cada vez mayor. Si bien los proyectos anteriores rara vez superaron los 10 millones de dólares, 21 nuevos planes desde 2017 alcanzaron un valor de más de 25 millones, asegura el documento. Estos datos apuntan a una mayor ambición y poder transformador de estos proyectos, con las poblaciones más vulnerables como principales beneficiarias. Pero el informe también destaca la necesidad de mayores evidencias que demuestren la efectividad de los proyectos de adaptación en su objetivo de reducir los riesgos climáticos.
MAYOR FINANCIACIÓN
A pesar del aumento de la financiación internacional disponible para la adaptación, el informe señala que la financiación necesaria para implementar estos planes de adaptación no está creciendo lo suficientemente rápido, especialmente en los países en desarrollo. Esto ocurre porque, según el PNUMA, los costes de la adaptación siguen siendo mayores que el apoyo financiero: “Los costes anuales para la adaptación en los países en desarrollo se estiman en unos 70.000 millones de dólares y se espera que esta cifra alcance los 140.000-300.000 millones en 2030 y 280.000-500.000 millones en 2050”, expresa el informe.
A pesar de esto, el informe aprecia oportunidades para lograr avances en la creación de un sistema financiero más sostenible y anima a la inversión, puesto que una acción decidida reduciría sustancialmente los costes asociados. Por ejemplo, nuevas herramientas como los criterios de inversión en sostenibilidad, los principios de divulgación relacionados con el clima y la incorporación de los riesgos climáticos en las decisiones de inversión pueden estimular el flujo de capital hacia la resiliencia climática, asegura el documento.
SOLUCIONES BASADAS EN LA NATURALEZA
El informe reconoce la importancia creciente que una mayoría de países otorga a las Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN) para la adaptación al cambio climático como opciones altamente eficientes de bajo coste con muchos co-beneficios asociados, aunque señala que existen pocos planes tangibles y que la financiación disponible para estos proyectos aún es limitada.
El PNUMA destaca que las SbN están implementándose en todo el mundo, en diferentes sectores y orientadas a reducir distintos riesgos asociados al clima, y muchas de ellas conectadas con la protección de la biodiversidad. Además, tienen la ventaja de poseer una alta escalabilidad del nivel local al nacional y de integrar los múltiples beneficios en distintas áreas. Sin embargo, también expone la necesidad de potenciar mecanismos financieros innovadores que ayuden a la expansión de estos proyectos.
Las SbN se aplican de múltiples formas para minimizar los riesgos climáticos al disminuir la exposición o vulnerabilidad de los diferentes espacios. El informe explica que tienen un alto potencial para reducir los riesgos asociados a fenómenos costeros, precipitaciones extremas, inundaciones, altas temperaturas, sequías, etc., contribuyendo a fortalecer la resiliencia climática de los ecosistemas y la sociedad.