En esta publicación se describen las acciones que los responsables de las políticas pesqueras deben llevar a cabo en el contexto del cambio climático, como son: Fortalecimiento del sistema de gobernanza global, un mayor uso de los sistemas de gestión basados en los derechos, la protección de los ecosistemas, transformación de la industria pesquera evitando las subvenciones perjudiciales para el medio ambiente y un enfoque más sostenible para la captura de mariscos y, en particular, utilizando la acuicultura como parte fundamental de la respuesta al cambio climático.