En pocos días (18 de septiembre) finaliza el plazo para presentarse a la nueva convocatoria para la Misión de Adaptación, cuyo objeto es comprender mejor cómo interactúan las crisis del clima y la biodiversidad, cómo se refuerzan mutuamente y cuál es la mejor manera de abordarlas conjuntamente. Para ello pretende crear herramientas y diseñar soluciones para romper los compartimentos estancos y abordar los múltiples riesgos derivados de las crisis del clima y la biodiversidad de forma sistémica, maximizando las sinergias y minimizando las compensaciones entre ambas crisis.